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Cobreloa
fracasó en un nuevo intento por rescatar al menos un punto
de canchas extranjeras. Y pese a la inapelable y estrepitosa derrota
ante Sao Caetano por tres goles a cero, en encuentro válido
por el Grupo 1 de Copa Libertadores de América, el técnico
Víctor Merello y sus jugadores todavía pueden seguir
acogiéndose a esa vieja esperanza que brindan las matemáticas
y los cálculos basados en supuestos: clasificar ganando el
encuentro ante Cerro Porteño en Calama, y rescatar una unidad
jugando de visita ante el eliminado Alianza en Lima.
En
honor a la verdad, Sao Caetano dista mucho de ser un rival de jerarquía,
pero Cobreloa jamás encontró el camino para complicar
al cuadro brasileño. Por el contrario, la zaga loína
acusó desde el inicio serias deficiencias defensivas que
bien supo aprovechar el modesto Sao Caetano, que se puso en ventaja
a los 24’ por intermedio de Wagner.
Ambos
equipos se mostraron incapaces de encantar la vista con buen fútbol
durante la primera parte. Los 45 minutos iniciales fueron un muestrario
perfecto y vergonzoso de machetazos, patadas, escupitajos, empujones
e insultos a granel. El árbitro argentino Horacio Elizondo
jamás logró poner atajo a tan penoso espectáculo
en la cancha.
En
la segunda fracción Cobreloa intentó soltar esas amarras
puestas por su propia indecisión, por esa crónica
incapacidad de provocar peligro, de hilvanar alguna jugada que gatille
cierta preocupación en los rivales. Cuando mucho pudo contener
en el mediocampo al discreto elenco paulista, pero careció
de ideas para salir de su pesado letargo. De tanto correr (o corretear,
que no es lo mismo), de tanto pegar y recibir, los dirigidos de
Víctor Merello se quedaron sin piernas, lo que posibilitó
la supremacía total de Sao Caetano cuando promediaba el complemento.
A
los 57’ Brandao casi batió al meta Alex Whiteley, pero
Mauricio Pozo despejó en la línea; a los 70’
Daniel cabeceó tras un lanzamiento de esquina y el esférico
se perdió por escasos centímetros junto al vertical.
Pero de tanto presionar era previsible el segundo tanto brasileño,
y éste llegó finalmente a los 71’ por intermedio
de Wagner.
A
los 75’ Cristian Gómez sepultó a Cobreloa anotando
en su propio arco. Y ya que no había mucho por hacer con
tal de revertir el sombrío panorama -salvo ver la expulsión
de Adaozinho los 86', tras propinar un fuerte puñetazo a
Rodrigo Meléndez-, los jugadores de Cobreloa se dedicaron
a evitar un nuevo castigo a tanta falta de jerarquía y consistencia
futbolística. Brandao (77’) y Wagner (79’) estuvieron
cerca de marcar el 4-0, resultado que habría sido demasiado
premio para un equipo que, a las claras, debe ser el exponente brasileño
más discreto de los últimos tiempos.
Ficha
Técnica:
SAO
CAETANO (3): Silvio Luiz; Russo, Daniel, Dininho, Rubens Cardoso;
Serginho, Marcos Senna, Adaozinho, Aílton; Wagner y Brandao
(78', Somalia). DT: Jair Picerni.
COBRELOA
(0): Alex Whiteley; Mauricio Pozo, Luis Fuentes, Cristián
Gómez, Rodrigo Pérez; Rodrigo Corrales, Pablo Adbala,
Rodrigo Meléndez (87', Mauricio Dinamarca), Fernando Cornejo;
Juan Carlos Madrid (46', Osvaldo Canobbio) y Patricio Galaz. DT:
Víctor Merello.
Goles:
1-0, Brandao (24'); 2-0, Wagner (71'); 3-0, Cristian Gómez
(75', en contra)
Expulsado: Adaozinho (86')
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