Cuando escojas la forma en que vas a componer el texto, tienes que tener en cuenta varios aspectos:
La tipografía tiene que estar de acuerdo con el uso que se le va a dar a tu diseño
Lo más importante es que sea legible. No sacrifiques la legibilidad por la estética. Cuida el estilo, tamaño y color
Asegúrate de usar el tamaño adecuado, que sea legible y adecuado al sistema de impresión que estés usando, ya que en algunos el texto muy chico se puede emplastar.
Calcula el espacio que tienes para acomodar tu texto para poder determinar la fuente, el tamaño, y los espacios intertipos e interlíneas.
Hay 5 maneras de componer un texto:
- Monotipia
- es a base de una impresión hecha con tipos individuales, es decir, matrices de metal que tienen cada una una letra son compuestas en un marco o rama, y con eso se imprime un texto que puedes utilizar en tu original.
- Linotipia
- También funciona a través de tipos de metal, pero son tipos que se hacen a través de una máquina que funde cada línea de texto completa. Luego son enramadas e impresas
- Fotocomposición
- Funciona a través de una matriz que imprime, con un rayo de luz, las letras en papel fotográfico. Da una buena calidad
- Letras adheribles
- Las letras adheribles (Letraset) se venden en planas, y se transfieren a un papel o al original. No es recomendable para textos largos, generalmente se usa para títulos o textos cortos.
- Digital
- A través de una computadora, que tiene salida a una impresora laser de alta resolución, o directamente a un archivo. Si mandas imprimir a partir de un archivo, asegúrate de incluir las fuentes; aún cuando el buró tenga la misma fuente, puedes tener problemas si son distintas versiones. Si tienes poco texto, te conviene convertirlo a curvas para evitar problemas de compatibilidad

© Copyright 1998 Miren Creixell y Kemie Guaida