PRESENTACION
Esta es la
música que nos acompañó durante los  ¿mejores?
años de nuestras vidas. El rock progresivo, el undergraund, sus letras;
la llegada de la electrónica 
electrocutando algunos cerebros que quedaron saludablemente dañados
con Brain Damage (Pink Floyd) y Brain Salad
Surgery (Emerson, Lake
& Palmer). Los poemas dadaístas contenidos en las letras
de Jethro Tull, un hombre sin tiempo y sin
espacio dibujado por  Dalí
y puesto a sonar por Tangerine Dream. El apocalipsis
en la lengua de Peter Gabriel. El extasis
de un suspiro de Ian Anderson. La rapsodia
bohemia por la muerte de un hijo de la Reina  .
Lo que los viejos llamaron "música americana", como si los dominicanos
hubiesemos atomizado la isla sobre la costa africana. Como si Londres y
Berlín quedaran en Houston. Finales de los sesentas heredados en
toda la geografía de los setentas.
Antes de nuestra generación
llegar a esta música, existía un paisaje psicodélico
en la ventana azul del 
ojo. Ya la nostalgia de la paz
se había perdido para siempre. No logramos ver a Ginsberg
y a Hendrix convulsionando las alas de acero
que nos harían volar en un viaje de regreso desde Vietnam hasta
Woodstock, y la festiva muerte de Greatful Dead
cantada por una adolescente vestida de negro en Liverpool. A Andy Warhool
y a Jim Morrison besándose
místicamente en un ascensor de Park Avenue. Nosotros recogimos la
sal de esos veranos, y un LP rayado podía ser el Grial.Pero heredamos
la adrenalina y una lágrima Ya nadie usaba LSD pero María
Sabina había descubierto una nueva religión en la xiloscibina,
casi antes de que la historia quedara desprestigiada para siempre jamás.
Ya en los noventas, nuestros hijos serían testigos del suicidio
de Kurt Cobain en su Nirvana,
y de la decadencia asquerosa de Marilyn Manson.
También heredarían los primeros CDs
rayados, cuando los mayores nos habíamos entregado ya al delirio
del jazz. A los que nos tocó vivir el interregno, tuvimos que explicarles
que el grunge y el alternative, el punk y el heavy
metal, tienen una deuda impagable con las bandas que nosotros ya habíamos
heredado: Black Sabbath, Urryah
Heep, Deep Purple,
Led Zepellin, Allman
Brothers, Iron
Butterfly, Guess
Who, ...
A las puertas de un nuevo milenio,
la cibernética ha conseguido llevar la página a la música
y viceversa. Algunos midis
dan fe por todo el ciberespacio, y hoy aquí,en esta
 Cantidad
Hechizada, en este
Trocadero cósmicamente congelado, en esta página que he creado
en Santo Domingo, Capital de la República Dominicana, para
la diversión de mi hijo Pavel.
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