Antonio Martínez Picar
Bajo los cielos venezolanos se pudo disfrutar una vez más de una fuerte actividad de meteoros provenientes del enjambre de las Leónidas, probablemente el enjambre más estudiado de la historia de la astronomía de meteoros.
El Proyecto Leónidas 2001, propiciado por MetVen desde el principio de este año, ha arrojado sus primeros resultados: hasta la fecha se han recibido 32 reportes de diferentes observadores realizados desde diversas localidades del país, sumando un total de 100.93 horas de observación y contabilizando 4166 meteoros provenientes de la lluvia de las Leónidas, convirtiéndose en la lluvia con mayor número de registros de observación reportados en Venezuela hasta la fecha. Los autores de los reportes visuales son:
Jesús Amaro, Arnaldo Arnal, Ahitza de Cabo, Luis Díaz, Yndira Díaz, Juan Fernández, Artemi García, Oscar Gómez, Ramiro Gómez, Jesús Guerrero, Adonay Lizardo, Tito Lizardo, Antonio Martínez, Henry Mendt, Mauricio Molina, Cianny Orellanes, María J. Paradisi, Alexis Peña, Jesús Piñeiro, Sergio Radaelli, Beriozka Rodríguez, Sami Rozembaum, Iván Rubesa, Zugey Rubio, Gilbert Sánchez, Jennifer Sánchez, Francisco Suárez, Héctor Suárez, Jhonny Torres, Manuel Urquiola, Rodrigo Velázquez y Omar Zaza.
Con las distribuciones por magnitud de los
meteoros de lluvia durante la noche del máximo, se realizó el Perfil de Relación
Poblacional (perfil de r) mostrado en la Figura
1 ,
en el cual se aprecia la evolución de este parámetro con el transcurrir del
tiempo. En él se puede determinar que el mínimo valor de r se presentó
a las 6h56m de Tiempo Universal (TU) del 18/12/2001 con
un valor de 1.36±0.32, esto es aproximadamente equivalente a decir que
fue en este momento que se presentó la mayor cantidad relativa de bólidos. Posteriormente,
la relación poblacional presentó un comportamiento creciente hasta alcanzar
un valor máximo de r=1.70±0.26 hacia las 9h03m
TU, pudiendo interpretarse esto como que la lluvia fue presentando una mayor
cantidad relativa de meteoros débiles. De hecho los meteoros brillantes están
usualmente asociados a meteoroides viejos, es decir, meteoroides que
tienen muchas revoluciones y que han sobrevivido a los efectos erosivos de los
enjambres, todo esto gracias a su mayor tamaño. Pudiera entenderse, pues, que
durante la primera parte de la observación, la Tierra estaba inmersa en una
zona vieja del enjambre, y que fue adentrándose paulatinamente en una
zona de material más reciente. Este resultado es congruente con los nuevos
modelos de enjambre concebidos en los últimos años [1,
2] en los que se utiliza la figura de filamento
para designar aquellas zonas espaciales con mayor densidad de meteoroides y
las cuales están referidas a los últimos pasajes del cometa progenitor (55P/Tempel-Tuttle).
Efectivamente, si estas teorías son correctas, los resultados obtenidos indican
que hacia el amanecer del día del máximo, la Tierra se adentró en el filamento
correspondiente al pasaje del cometa en el año 1767.
A partir del Perfil de r, se construyó
el Perfil de Actividad (perfil de THZ) el cual se muestra en la Figura
2.
Se aprecia que, a pesar que la actividad de las Leónidas mostró una tendencia
creciente durante casi todo el período de observación, también hubo leves variaciones
y breves caídas de la actividad. Este perfil hace evidente el hecho de que a
partir de las 8h19m TU (del día del máximo), la actividad
presentó un incremento en la tasa de variación, alcanzando un valor máximo de
THZ=351±22 hacia las 9h03m lo que invita
a pensar que en Venezuela apenas tuvimos la oportunidad de apreciar el principio
de la inmersión de la Tierra en el filamento de alta densidad antes mencionado.
Esto es congruente con los reportes globales preliminares de la International
Meteor Organization (IMO) [3], en los que
se asoma la posibilidad de la ocurrencia de un máximo para las 10h39m
TU (long solar=236.1371º). De nuevo, las Leónidas superan el nivel de actividad
para Venezuela alcanzado en 1998 [4] aunque
se presenta un tanto menor que el alcanzado en 2000 (aunque este valor se obtuvo
por corrección al considerar la influencia negativa ejercida por la luz de la
Luna presente en aquella ocasión) [5].
Debido a la gran cantidad de bólidos, las Leónidas se convirtieron en una excelente oportunidad para obtener fotografías de meteoros. Al momento de escribir estas líneas, se tiene conocimiento de fotografías tomadas por Juan José Downes, Julio Nava y Jorge Rojo. Este último colaborador cedió gentilmente a MetVen las fotos logradas por él en la noche del máximo. Algunas de ellas se muestran en las Figuras 3, 4 y 5.
En definitiva, las Leónidas en 2001 nuevamente complacieron a los ansiosos observadores venezolanos quienes disfrutaron de una fuerte actividad acompañada de muchos bólidos y varias estelas persistentes. Los registros útiles fueron enviados a IMO para colaborar con el análisis global de esta lluvia el cual debe publicarse prontamente. El equipo de MetVen está muy complacido con los resultados obtenidos con este proyecto y desea agradecer a todos los observadores mencionados por su enorme colaboración en el estudio de esta lluvia de meteoros.
Figura 3:
Bólido Leónida sobre la Osa Mayor fotografiada por Jorge Rojo el
18 de Noviembre de 2001. |
Figura 4:
Leónida sobre Orión fotografiada por Jorge Rojo el 18 de Noviembre de
2001. |
Figura 5:
Dos Leónidas sobre la Osa Mayor fotografiada por Jorge Rojo el 18 de Noviembre
de 2001. |
En 2002 se espera que la Tierra atraviese los filamentos de 1767 y 1866 los cuales presentarán máximos para las ~4h y las ~10h30m TU de la noche del 18 al 19 de Noviembre. Lamentablemente este período coincide con Luna Llena lo que en definitiva afectará negativamente la observación, sin embargo los resultados de 2000 (en los que también hubo interferencia de la luz de la Luna) demostraron que es posible obtener información útil de una observación bajo estas condiciones [5]. Los astrónomos están a la espera de la publicación de los resultados del análisis global de la lluvia en 2001 para ajustar sus modelos y seguir refinando las predicciones de actividad de las Leónidas para los próximos años. En MetVen estaremos haciendo seguimiento a estos estudios para tratar de mantener la información lo más actualizada posible.
[1] McNaught, R. y Asher, D., 1999, Leonid dust trails and
meteor storm, WGN, 27(2), pp. 85-102.
[2] Lyytinen, E., Nissinen, M. y Van Flandern,
T.; 2001, Improved 2001 Leonid Storm Predictions from a Refined Model, WGN,
29 (4), pp. 110-118
[3] Arlt, R., 2001, Leonids 2001 - Updated Profile, en el WebSite de IMO,
http://www.imo.net/news/news.html
[4] Martínez, A, 1999, Las Leónidas desde Venezuela en 1998, Análisis Global
de Actividad, en el WebSite de MetVen,
http://www.geocities.com/leoven98/LeoVen98.htm.
[5] Arlt, R. y Gyssens, M., 2000, Bulletin 16 of the
International Leonid Watch: Results of the 2000 Leonid Meteor Shower, WGN,
28 (6) pp. 191-204
Última Actualización: Febrero de 2002