Cuadro de la Conquista
¡ Oh tu Creador
y Formador !
¡ Danos muchos
buenos caminos, caminos planos !
¡ Que los
pueblos tengan Paz, mucha Paz, y que sean felies; danos buena vida, vida
útil y existencia !
¡ Oh tu,
Jun Raqan, Chipi Kakulja´, Rax Kakulja´, Junajpu, Ixbalanke,
Tepew, Qukumatz !
¡ Alom, Qajolom,
Ixpyakok, Ixmukane, Abuela del Sol, Abuela de la Luz !
¡ Que Amanezca,
que llegue la Aurora !
Pop Wuj
A medida que transcurre el tiempo, el Pueblo Maya escribe un capítulo
más en la historia. Ha tomado un nuevo papel pasando a ser
de simples y pasivos espectadores, sin voz ni voto para la opinión
a un movimiento activo que paso a paso ha venido luchando por su reinvindicación,
lo que un día nuestro abuelos habian anunciado que sucedería,
el Pueblo Maya ha sabido interpretar el contenido de nuestro libro sagrado
el Pop Wuj, en donde nadie se va quedando atras y todos se van levantando,
ha pasado la obscuridad misma que trajo una guerra de más de 35
años de lucha armanda, ha dejado huerfanos, viudas y gente desplazada
y muerte, pero sigue firne en su lucha con el fin de que sea reconocida
como Pueblo en igualdad de derechos y opciones de superación, el
cual contiene una historia milenaria y espera a que llegue la aurora
el Ak´ab´al del nuevo milenio y poder constriuir con sabiduría
la nueva nación multicultural, multiétnica y multilingue.
INTERCULTURALIDAD
Las relaciones sociales de los grupos humanos, en cualquier tiempo y lugar, han atravesado particularidades y especificidades culturales de dichos grupos, produciendo intercambio, modificación creación o eliminación de valores, prácticas y costumbres, lo que conlleva aparejadas relaciones conflictivas, también. Es decir, la multiculturalidad implica interculturalidad, aunque no en la misma intensidad o al mismo tiempo. Expliquemos esto especialmente para Guatemala.
Para ello, es necesario definir los siguientes conceptos con el propósito de comprender nuestra realidad: ACULTURACION, podría significar el proceso por el cual, utilizando la fuerza militar, económica, ideológica, etc., un grupo determinado culturalmente, impone sus valores a otra cultura que se ve y siente diferente. DECULTURACION significaría entonces, inferiorizar, degradar, desvalorizar, negar o suplantar, por parte de un grupo dominante, la cultura de los dominados con el afán de reducirlo a su mínima expresión y quitarle legitimidad al sistema cultural de un pueblo, con el objeto de controlarlo o explotarlo por ser diferente.
INCULTURACION, es el proceso que utilizando los elementos de la cultura dominada, como caballo de Troya, pretende imponer los valores de la cultura dominante, en una actitud de aparente aceptación de aquellos elementos culturales más o menos homogéneos o similares a ambas culturas, con el objetivo de ampliar la dominación ideológica.
Estos conceptos, no los únicos, se inscriben en el marco de la multiculturalidad e interculturalidad, aunque no lo agotan y se dan en el proceso colonizador en un sentido negativo porque truncan, al haberse aplicado a la realidad maya, el proceso civilizatorio de los mismos, provocando cambios culturales, por un lado, y afianzando los vectores básicos de la cultura, por el otro. Y en el caso de Guatemala, esto adquiere mayor relevancia por los 5 siglos de verificación de los intentos de imposición y de resistencia cultural que registra la historia del pueblo Maya.
Por cuestión explicativa y en el ámbito del tema que hoy se aborda, podemos dividir la historia de Guatemala en 4 momentos cruciales y definitorios, especialmente los tres primeros que ya han transcurrido.
En un primer momento, el encuentro y choque cultural que tuvo lugar con la invasión española a tierras mesoamericanas, donde prevaleció la Aculturación a través de la usurpación y expropiación de las tierras, el sometimiento de los pueblos, la desarticulación de la organización social, la imposición religiosa, en fín, una negación completa de la cultura maya y sus diversas manifestaciones etnico-culturales: se satanizó la cultura, la religión y la gente.
El segundo momento, caracterizado por la deculturación, tuvo como ribetes claros, la imposición cultural y religiosa, usando las instituciones españolas ya entronizadas en la sociedad colonial, con la finalidad de quitarle legitimidad al proyecto de sociedad y de cultura que aún, los pueblos mayas, consideraban como suyo y validaban para la resistencia contra el invasor. Si el primer momento implicaba negación, este segundo significaba desvalorización, aunque ambos procesos corren aparejados en diferentes intensidades y de acuerdo a las circunstancias históricas.
Los mayas de hoy, asistimos al tercer momento, caracterizado por la Inculturación, cuyas líneas esenciales se orientan al RECONOCIMIENTO de la diversidad cultural y cuya máxima expresión al momento, se halla en el Acuerdo sobre Identidad y Derechos de los pueblos indígenas, formulado en el marco de las negociaciones de Paz, pero cuya propuesta final es la expresión de toda una vertiente de movimientos y luchas sociales que, sin ser coordinadas, expresan unidad de reinvindicaciones dentro de la diversidad de realidades sociales que la misma colonia indujo.
Esa multiculturalidad existente desde el inicio del primer momento, hasta hoy es reconocida por el Estado guatemalteco, con 5 siglos de retraso. Sin embargo, este reconocimiento tiene un carácter formalista, de letra muerta, porque según algunos indicadores, en el fondo del pensamiento gubernamental, se manifiesta un rechazo a operativizar plenamente los acuerdos, reduciendo la aceptación a aquellos aspectos superficiales y no de fondo, que se pretende hacer las mismas cosas con nueva cara.
Negación, Desvalorización y Reconocimiento son facetas de una REALIDAD INTERCULTURAL que nos obliga a pensar que la misma no se agota con esos tres momentos y que debe conducirnos a plantear un cuarto momento que podríamos definir como de DESARROLLO Y REIVINDICACIÓN CULTURAL, que marque una relación que aparte de ser Multicultural, complete el marco de relaciones interculturales y que cumpla algunos condicionantes necesarios como IGUALDAD Y PARTICIPACION EN LO ECONÓMICO, SOCIAL, CULTURAL Y EN EL EJERCICIO DEL PODER, como plantea Demetrio Cojtí, La reivindicación es hacia la participación dentro del estado guatemalteco dentro de un trato igualitario, neutral, al servicio de los pueblos indígenas.
Es claro, que la tarea para el pueblo maya, es enfrentar y determinar el cuarto momento y debe comenzar por afinar los espacios de unidad y sobre todo, de consolidación de la Identidad para construir un verdadero espacio político, tomando como base necesaria aunque no suficiente, los acuerdos de identidad mencionados en el presente trabajo y buscando las formulas de operativizarlos, procurando incidir de manera organizada en un gobierno que, estamos seguros, su intencionalidad es quedarse en los tres primeros momentos..
LA UNIVERSIDAD MAYA
Casi nadie niega hoy que la educación intercultural es un condicionamiento fundamental para la justicia social y que todos los pueblos tienen derecho a buscar el tipo de educación que desean.
Ya se ha realizado un esfuerzo colectivo de diseño curricular de la Universidad Maya, con la participación de representantes de organizaciones mayas y de otras organizaciones de apoyo educativo. Para la creación de la Universidad Maya hay mucho camino que recorrer, esto implica, no sólo borrar las barreras impuestas por el Estado, sino luchar contra los obstáculos impuestos por las mismas universidades existentes en Guatemala, que no quieren perder el espacio que, según ellas, les robaría un centro maya de estudios superiores.
La universidad del próximo Baqtun debe estar con la nación y no contra de ella, significa derribar las barreras artificiales entre los seres humanos y entre éstos y la naturaleza, a fin de asumir su más profunda misión; ser sede institucional para la sistematización, la creación y difusión del conocimiento universal; tal es su dilema y tales son sus límites.
La Universidad Maya se fundamenta en los principios
del pensamiento maya que orientan la vida, el origen, el desarrollo
y la trascendencia de la persona y su comunidad. Y define como su
misión contribuir a la consolidación de una nación
multilingüe, multicultural. plurilingüe, democrática y
participativa en el proceso de desarrollo integral sostenible de los pueblos,
en equidad y respeto mutuo.